Estamos hechos del tiempo, ese que hoy nos invade.
El que tiene la capacidad de inundarnos en pánico, sin siquiera una palabra.
El que ayer era efímero, y hoy es eterno.
El que todo lo cura, pero ahora lo hace todo imposible.
Ese tiempo en el que íbamos a cambiar. Ese tiempo que dejamos para después.
Ese que creíamos tener.
Ese tiempo somos,
o en eso nos convertimos.