Otra vez no podes dormir porque tu dolor no se alinea con la calma y colapsas, pero ¿cuántas veces intentaste arreglar algo que no rompiste? En esas veces en las que te encontrás solo, con la constante tristeza que te mantiene despierto cuestionándole a tu insomnio cómo seguir, es cuando más te tenés, pero el dolor te nubla y no lo ves.
¿Cuántas noches pasaste queriendo olvidarte de lo que antes te hizo feliz? No te olvides que todo llega, todo pasa y asi como tus carcajadas se volvieron llantos de tristeza, vas a volver a reír una y mil veces más. Se cerró una puerta y un millón se abrirán en con el tiempo.
Te culpaste del dolor que no causaste, te caiste, tenes que levantarte. No te obligues a olvidar, porque muchas veces es la esencia de esos recuerdos lo que nos mantiene vivos, no los borres, llevalos contigo, te aseguro que nos mata mucho más el olvido.