Todos somos parte de todo y hay que entenderlo, las acciones que generamos se transforman en algo único y dejan huellas en los que queremos.
Los valores con los que vivimos se nutren de nuestra supuesta educación y uno va haciendo camino al andar, llevando a cuestas lo que le tocó al azar y a los que eligió a lo largo de la vida.
El problema es que todos vamos por caminos distintos y aprendiendo cosas diferentes.
Algunos aprenden a la fuerza, en compañía de situaciones difíciles y otros no tienen la opción ni de aprender.
Por eso, agradezco cualquier vivencia que me sirva de aprendizaje.
Por eso, agradezco la suerte de poder elegir a las personas que quiero que me acompañen y siento orgullo de todo lo que elijo para vivir esta vida tan compleja en tantos sentidos.
Tenemos tiempo para vivir y lo más lindo es que todos algún día vamos a poder elegir como queremos vivir, llevando con nosotros eso que aprendimos y sabiendo aprovechar las oportunidades, porque hay quienes no las tienen que lastimosamente, son muchos.